4 hoteles, 4 estilos para una estancia sublime
Los Hoteles ocupan en nuestras vacaciones, un aspecto tan importante como el destino que vayamos a conocer .
Los alojamientos son nuestro hogar cuando nos encontramos fuera de casa, y por lo tanto, no solo deben tener los requisitos necesarios para cubrir nuestras necesidades, sino también tener en cuenta, que el hotel que elijamos y la quintaesencia que lo envuelve, nos va a repercutir a la hora de sentirnos más integrados con la idiosincrasia del lugar, y por tanto más confortables, placenteros, y con buena disposición.
La gran responsabilidad de estas cualidades que todos deseamos encontrar en un hotel, es sin duda y sobre todo, su estilo y decoración.
Descubrir que entre distintos diseños, puedes gozar de la magia que encierra cada uno de ellos, contribuye a lograr el viaje más apasionante.
Hoteles con diferentes estilos
Estilo Moderno: Grand Hotel Central Barcelona
Este es el carácter escogido para vestir las estancias de este edificio, que data de comienzos del siglo XX, y que en ningún momento entra en disonancia con lo realmente útil. Primando siempre la luz natural, sus habitaciones nos abrazan con colores claros, que van desde beigs, pasando por grises y blancos, y dando pequeños toques de colorido en objetos muy puntuales.
Un ambiente nada recargado, cuyos rincones poseen personalidad propia, ya que los objetos sumamente escogidos, “brillan” cada uno por sí mismos.
Madera, vidrio, tapizados, metal, son algunos de los materiales que combinados con elegancia suprema, dan la rápida sensación de todo un hotel afectuoso y de belleza singular.
Como dictara en su día Ludwing Mies, menos es más, y aquí los espacios vacíos cobran importancia, restándola a los objetos ornamentales o simplemente a los accesorios. Dichos espacios están registrados con los mínimos elementos posibles, dando integridad al conjunto y sacrificando la parte.
Los colores para este relajante lugar, son tonos puros con fondos suaves y claros. El mobiliario se ajusta a lo necesario y básicamente funcional.
Maderas, piedra casi sin manipular, venecita. Todo ordenadamente conciliado, forman una estética que tiende al descanso y la serenidad.
Los años 20 vieron nacer a este edificio señorial, y el 2009 lo vio restaurarse de la mano del Parisino Jack García, sin perder un milímetro su estilo original Marroquí con pinceladas arábigas.
La cultura y el encantamiento que envuelven este estilo, está impreso en cada uno de sus rincones.
Mesas bajitas y talladas para el té, Arcos, Mosaicos, Marcos de espejos tallados en cobre, plata o metal… Rociados de colores vivos, y lámparas repujadas, las percepciones exóticas nos muestran la faceta más misteriosa de una personalidad intensa y subyugante.
El estilo bohemio es el que respiramos en este Hotel Parisino, donde la identidad libre y soñadora conjugan con las telas, colores, accesorios y muebles de diferentes apuestas culturales.
Un hotel cálido, vistoso y nada aburrido, los colores son clave para un estilo que nos evoca sensaciones hippies o de los años 60.
Hoteles cuyos diseños nos hacen viajar no solo unos pocos o muchos kilómetros, sino también deambular a través del tiempo y las diferentes filosofías que tras el buen diseño, quedan plasmadas eternamente, y que nosotros tenemos la oportunidad de revivirlas a través de ellos.